Desafortunadamente hay una diferencia cuando se trata de planificación financiera. Cuanto menor es tu ingreso, es menos probable que tengas un plan financiero. Pero no tiene por que ser así.
Un informe en el año 2016 encontró que solo el 37 por ciento de los trabajadores estadounidenses con ingresos anuales entre $35,000 y $100,000 tienen un plan financiero integral para hacer crecer sus ingresos. Mientras tanto, el 48 por ciento de los trabajadores con un salario anual de más de $ 100,000 tienen un plan. Además, los estadounidenses más ricos tienden a tener planes financieros más completos que aquellos que generan ingresos medios.
El problema con este escenario es obvio: la planificación financiera puede ayudar a todo el mundo, no solamente a las personas que generan los salarios más altos. Pero muchos asalariados de bajos y medianos ingresos piensan que no ganan suficiente dinero como para merecer tener un plan financiero.
Esta es una manera de pensar bastante dañina, ya que la falta de un plan financiero puede arruinar tus esfuerzos para ahorrar para la jubilación, ayudar a pagar la educación universitaria de tus hijos, o inclusive comprar tu casa.
Aquí hay seis razones por las cuales necesitas un plan financiero, incluso si no generas más de $100,000 por año.
1- Sin un plan, es más difícil establecer o cumplir metas financieras
¿Cuánto dinero necesitas ahorrar para una jubilación saludable y feliz? Sin un plan financiero, probablemente no tengas idea. ¿Y cómo acumulas estos ahorros? De nuevo, si no sigues un plan financiero, es probable que no cumplas con tus objetivos de jubilación.
De acuerdo con el estudio que se realizó en el año 2016, las personas con planes financieros ahorran alrededor del 10 por ciento de sus sueldos para la jubilación, mientras que aquellos que no tienen ahorros solo el 6 por ciento. Esto puede hacer una gran diferencia.
El estudio usa el ejemplo de una persona que comienza con $50,000 en ahorros para la jubilación. Si esa persona gana $100,000 cada año y ahorra el 10 por ciento de ese salario durante 25 años, habrá acumulado hasta $1.13 millones en ahorros para la jubilación. Mientras tanto, alguien que ahorre el 6 por ciento de ese ingreso durante 25 años solo habrá ahorrado alrededor de $890,000.
2- Un plan financiero puede ayudarte a controlar tus gastos
Cuando llegas al final de cada mes, ¿estás casi agotada tu cuenta bancaria? ¿Sabes dónde ha ido tu dinero? Si no, un plan financiero puede ayudar.
Un pilar básico para crear un plan financiero implica rastrear a dónde va tu dinero cada mes. Se trata de crear un presupuesto para el hogar que enumere el promedio de dólares que gastas en todo, desde servicios públicos y renta, hasta transporte, comestibles, cenas y entretenimiento.
Una vez que tengas estas cifras frente a ti, y una vez que las compares con la cantidad de ingresos que aportas, puedes ajustar tus gastos para que no te quedes sin dinero constantemente cada fin de mes. Sin un plan financiero, simplemente vas a mantener los gastos en exceso.
3- Te va a ayudar a alcanzar grandes objetivos financieros
¿Quieres comprar una casa? O tal vez sueñas con ayudar a tus hijos a pagar su educación universitaria. Alcanzar objetivos financieros grandes como estos es una tarea mucho más desafiante si no tienes un plan financiero que te guíe.
Un plan financiero va a detallar la cantidad de dinero que vas a necesitar para alcanzar los grandes objetivos financieros de la vida: desde ahorrar lo suficiente para un pago inicial en una casa, hasta comprar tu primer carro, ahorrar suficiente dinero para ayudar a tus hijos a graduarse de la universidad sin montañas de deuda de préstamos estudiantiles.
Desafortunadamente, la mayoría de los estadounidenses que ganan ingresos bajos o de clase media no planean alcanzar estos grandes objetivos. El estudio efectuado en el 2016 encontró que solo el 41 por ciento de los trabajadores de ingresos medios tienen planes financieros para ahorrar para la educación universitaria de un niño. Un número mucho mayor, el 61 por ciento, de los estadounidenses más adinerados tienen planes financieros que abordan este desafío.
4- Te va a ayudar a proteger a tus seres queridos
Si mueres de forma inesperada, ¿qué problemas económicos recaerían en tus hijos o pareja? Si inviertes en un seguro de vida, puedes ayudar a proteger a estos seres queridos en caso de que mueras.
El problema es que los estadounidenses que no tienen planes financieros tienen muchas menos probabilidades de contratar un seguro de vida o de discapacidad, suficiente como para proteger adecuadamente a sus familias. El estudio descubrió que el 67 por ciento de las personas de ingresos medios han adquirido un seguro de vida o de discapacidad, mientras que el 83 por ciento de los que tienen ingresos más altos tienen estas políticas vigentes.
5- Con un plan financiero, es probable que tengas menos deudas de tarjetas de crédito
Una encuesta e índice de planificación financiera del hogar que efectuo en el 2013 la , encontró que aquellos con planes financieros saben cómo ustilizar las tarjetas crédito de manera inteligente. Ellos tienden a tener menos deudas de tarjetas de crédito y, cuando las tienen, es más probable que tengan un plan para pagarlas.
Según la encuesta, el 38 por ciento de los adultos sin un plan financiero tiene una deuda importante de tarjetas de crédito, y solo el 47 por ciento de estas personas tiene planes para reducirla. Mientras tanto, incluso un poco de planificación financiera parece ayudar a las personas a depender menos de las tarjetas de crédito.
Entre los adultos que entran en la categoría de “planificadores limitados”, lo que significa que tienen un plan financiero, aunque no especialmente detallado, es menos probable que tengan esa deuda. La encuesta encontró que el 61 por ciento de estos planificadores limitados no tienen deudas de tarjeta de crédito en absoluto. Y solo una de cada cinco personas con planes financieros integrales tiene una deuda importante de tarjetas de crédito que debe pagarse, y el 92 por ciento tiene un plan para hacerlo.
6- Vas a estar mejor preparado para una emergencia financiera
¿Qué sucede si la transmisión de t carro no funciona? ¿Qué pasa si la calefacción de tu casa se estropea en medio de una noche fría? Si no tienes un fondo de emergencia acumulado, es posible que debas pagar esas reparaciones con una tarjeta de crédito.
Peor aún, ¿qué pasa si de repente pierdes tu trabajo? Es por eso que ese cojín es tan importante. Los expertos financieros recomiendan que tengas al menos seis meses o un año de gastos de vida diaria guardados en un fondo de acceso fácil, como una cuenta de ahorros.
Crear un fondo de emergencia lleva tiempo, pero si tienes un plan financiero, es mucho más probable que reserves el dinero que necesitas cada mes, incluso si tu salario no es particularmente alto. Solo $200 o $300 por mes pueden acumularse con el tiempo. Y si tienes un plan financiero que te muestra cómo ahorrar ese dinero cada mes, tal vez reduciendo los gastos innecesarios, es mucho más probable que crees un fondo de emergencia.
Elavora un plan
Ahora que sabes por qué un plan financiero es tan importante, es hora de crear uno. La buena noticia es que, si bien un planificador financiero puede ayudar, no necesariamente tienes que trabajar con uno si hacerlo es demasiado costoso.
Con el auge de los teléfonos inteligentes y las tabletas hoy hay un montón de excelentes opciones para ayudarte a administrar tu dinero. Hemos redondeado algunas aquí para ayudarte a controlar tus cuentas y asegurarte de gastar inteligentemente. Estas aplicaciones financieras incluyen presupuestos, ahorro de dinero, inversiones, gastos y más. Para tener las cuentas claras, antes puedes anotarlar tus ingresos y gastos en este documento PDF y de ahí las puedes transferir a tu celular.
Comienza por crear un presupuesto familiar que muestre cuánto gastas cada mes, incluidas las estimaciones de gastos discrecionales y cuánto ganas. Luego, determina cuánto dinero necesitas ahorrar para la jubilación, la matrícula universitaria y la creación de un fondo de emergencia. Si no puedes ahorrar mucho, comienza por guardar lo que puedas cada mes. A partir de ahí, es posible que puedas aumentar esos ahorros al reducir algunos de tus gastos menos importantes.